Al maestro de las tablas...

Al maestro de las tablas...
Antonin Artaud

lunes, 25 de enero de 2010

El poema

El poema es como un acto de vida, en el cual se refleja el proceso circular en espiral ascendente; La imagen poética nos hace sentir la memoria y la visión, envolviéndonos a través del simbolismo; los dos puntos sumergiéndonos en el recuerdo:

La imagen plástica de un cuerpo fresco, alto, frágil, traslucido y resistente; (la madurez), es la imagen del niño, es el cuerpo naciente en el vientre y una vez a dar a luz, es parido con experiencias implícitas del mundo que le rodea;

El desarrollo de sí mismo en ir al ritmo del tiempo, en que el roció alberga para un nuevo día, así se desplaza en el cantar del tiempo sin el obstáculo de una sonrisa o de un llanto, desconocimiento a qué hora cantan los gallos o a qué hora cantan la lechuza;

Surge la lectura de un cuerpo que se arquea a través de las experiencias; un cuerpo de ligero juicio que anda por el camino, que a través de cada experiencia cumple un ciclo o un proceso circular en espiral ascendente: el huir de la vida:

De viene el canto donde la descripción del cuerpo de lo real y lo irreal es la vida misma, vida y juventud llena de imágenes ambiguas, donde se cierran los parpados surgiendo el canto de las profecías, que surgen por aliteración:

El poema solo se desarrolla, perfila la vida, el sueño de sí mismo, el comienzo de una vida: la juventud y la liberta:

Donde la rigidez no cambia el motivo en que ha sido escrito, la vida lo obliga abrir los palpados cada momento que pierde el ensueño, una vez palpa el arqueo de su cuerpo mientras sueña en el ensueño de su juventud:……………………………….. El poema.

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